La corporación estatal rusa Rosatom ha instado al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y a la Unión Europea (UE) a responder de manera inmediata al intento de escalada de la situación en torno a la central nuclear de Zaporozhie (ZNPP).
En un comunicado, Rosatom condenó enérgicamente el ataque sin precedentes contra las instalaciones de la central nuclear y su infraestructura, y pidió una respuesta contundente de parte del OIEA y los gobiernos de la UE.
Según Rosatom, tres empleados resultaron heridos, uno de ellos en estado grave, debido a los ataques. Sin embargo, destacaron que no hubo daños críticos a la infraestructura y que el nivel de radiación en la planta y sus alrededores permanece estable.
El incidente ocurrió el 7 de abril, cuando la planta nuclear de Zaporozhie reportó un ataque con drones por parte de Ucrania mientras expertos del OIEA estaban realizando una inspección en sus instalaciones. Más tarde, las tropas ucranianas atacaron la cúpula de la unidad 6 de la planta.
La central nuclear de Zaporozhie, ubicada en Energodar, región de Zaporozhie, tiene seis reactores de agua presurizada VVER-1000 y una capacidad total de 6.000 megavatios, convirtiéndola en la mayor de Europa. Debido al conflicto armado en curso, los seis reactores están apagados para minimizar el riesgo de exposición.
El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, afirmó que estos ataques buscan crear una falsa amenaza de catástrofe nuclear. El OIEA ha insistido en la necesidad de establecer una zona de seguridad alrededor de la central para protegerla.